Un cerco eléctrico es un sistema de seguridad o protección perimetral, que se instala en un perímetro determinado proteger personas o instalaciones, como casas, fábricas, comercios, terrenos, sedes públicas, centros carcelarios, entre otros. Consiste en la colocación de un alambrado conectado a un generador de alto voltaje para evitar el ingreso indebido de personas a la instalación.
Al intento de violación del cerco eléctrico, el sistema activa una alarma que puede ser o no sonora, que pone en alerta al personal de seguridad y a los que se encuentra dentro de la instalación. La alarma se activa ante manipulación de alambre del cerco o por la descarga que produce, la misma que no es mortal y produce un fuerte shock que atonte y disuada al intruso, que se garantiza por el cumplimiento de la normatividad establecida para este sistema.
Los cercos eléctricos basan su funcionamiento en pulsos eléctricos de alto voltaje y baja corriente. Están diseñados para producir una descarga no letal (pero si agresiva e insoportable) a los individuos que intentan pasar sin autorización. La fuente de energía es un electrificador o energizador. Este va conectado a la red de suministro de 220 voltios y por medio de un conjunto de componentes electrónicos regula la corriente y voltaje que recorrerá todo el cerco eléctrico; sistema viene integrado con una batería de respaldo que actúa automáticamente ante los cortes de luz, producido por cualquier causa.
Entre el alambrado (de acero) y los postes suele instalarse elementos aislantes también conocidos como aisladores (templadores e intermedios), que impiden que los pulsos de alto voltaje, pasen a los muros o resto de la casa o edificación. La corriente eléctrica de la valla electrificada no es continua, se da por pulsos intermitentes. Además se instalan sensores de flexión y los aros o argollas, que sirven para detectar el corte del alambrado o la presión ejercida sobre él. Se deben colocar también letreros de advertencia y opcionalmente sirenas o circulinas.
En la instalación de un cerco eléctrico AT Support, aplica correctamente el principio de funcionamiento de un cerco eléctrico y acata fielmente la normatividad establecido, realizando la delimitación de la zona y reconociendo los puntos vulnerables; así mismo, da la charla sobre los cuidados que se deben tener, como colocación de señales de seguridad, prevenir el contacto con el cerco por niños, mascotas y evitar la colocación de objetos sobre el cerco. Estos sistemas son de fácil de mantenimiento (evitar corrosión) y bajo consumo de energía (menor a 10w); y deben ser complementados por otros sistemas de seguridad ya que no protegen entradas principales como puertas.